Dos cosas, por Rockdrigo.
Después de un arduo año laboral, con mi novia decidimos emparejar nuestra licencia para febrero, donde con los pocos pesos ahorrados alquilaríamos una hermosa choza de barro y vitrales en la costa del balneario Marindia. Llegamos en un descascarado ómnibus... Seguir leyendo →
A Paulina ya le dije 100 veces que no quiero volver a la literatura, ya no me interesa le repito. Pero Paulina es terca. Una vez me confesó que siempre quiso ser mi amiga, pero al parecer yo no le... Seguir leyendo →
Se escapan de mi lentamente, los cuentos, las palabras, las imágenes, cuánto más hablo, más comparto, más se alejan La textura y los colores de los tapados de Anita (azul-rojo-amarillo-suave), meterme en la boca la cuchara del nutellino, las columnas... Seguir leyendo →
Llego diabética a la madrugada. Vuelvo sola a reencontrarme con las mantas de la prehistoria de mi nacimiento. Mi madre era flaca pero lloraba todo el tiempo. Lamo y mastico un bajón ordinario que inútilmente simula la compañía fálica, vacía... Seguir leyendo →